Ausencia

Fografía de Adriana Lestido, Argentina

Mis versos hijos han muerto de promesa prematura.
Yacen, adormecidos, en el borde de mi cama.
Como microbios, se esconden tras el borde de mis uñas, e insisten en no nacer.

Mis versos hijos gritaron, reclamaron tus inviernos;

no llegaste para octubre y mucho menos para enero.
Ya no me hago ilusiones. No te espero.
Como polvo, te has sacudido de mi destino
y en memoria te convierto.

Mi versos hijos te extrañaron mucho tiempo.

Se preguntaron por tu barba y por tus rizos de plata.
Por esos, tus gruesos dedos,
y por tu sonrisa llana.

Mis versos hijos fueron un concierto de gerundios; inútiles,

observaban las preguntas que deambularon por el cielo de mis dudas,
hartos, se quedaron con respuestas caducas.

Mis versos hijos te amaron, te rindieron pleitesía.

Te observaron desde abajo y te vieron grande,
vasto, mucho y suficiente
Demasiado por momentos, y hoy...
...hoy se sorprenden buscando un nombre a lo que fuiste.
Algo así como un necesario ausente.


© Derechos de Autor Gnosis Rivera.-






Comentarios

Entradas más populares de este blog

Y que con eso nos baste

Aviso importante

Cita